jueves, 17 de marzo de 2016

ENTREVISTA REALIZADA A JOSÉ ALANÍS "PEPE VENENO" - AÑO 2012





“La calle Yupes raya al medio encuentra Belvedere”, ilustra Fernando Cabrera en una de sus canciones más pintorescas. Postal montevideana que fue el marco de una entrevista totalmente disfrutable. Entre mate y mate transcurrió una mañana invernal muy amena, dentro de la calidez de su hogar. Imposible olvidar su bonhomía, su tono agradable al hablar, y la riqueza de su lenguaje. Un verdadero poeta que siempre estará ligado a nuestra máxima fiesta popular como una página emblemática. 

SUS COMIENZOS EN LA ESCRITURA 

“En mis épocas de estudiante ya escribí algunas rimas y consonancias. Ni por asomo imaginaba que luego esa tarea me iba a tomar la vida. Pinto, actúo, dibujo, pero desde hace muchísimos años a la fecha, la tarea que desarrollo de manera cotidiana es el quehacer poético. Incursioné escribiendo para Carnaval por primera vez en la década del 60, concretamente para la murga “La Nueva Ola” del Paso Molino. Fue la primera vez que seriamente me preocupé por escribir textos murgueros. También escribí para Jardineros de Harlem (Humoristas), y algún tema para Comparsas de Negros y Lubolos”.

LAS RAÍCES JAMÁS SE OLVIDAN

“La murga que más me marcó fue sin dudas, Araca la Cana. Con Catusa (José María Silva) íbamos a la escuela juntos, y nuestras madres eran amigas en común. Él ni siquiera soñaba que alguna vez iba a estar al frente de “La Bruta”. Acostumbré visitar sus ensayos siendo un gurí, ya que salían desde mi barrio, Belvedere, y llegué a ser amigo de “Pianito” (Ricardo Castro), director de directores. En 1950, cuando tenía once años de edad, recuerdo que Araca cantaba como nunca, y me fui enamorando de esa murga. Una afinidad que me fue atando a este amor, era lo anarcoide de las concepciones de la murga, sobre todo teniendo en cuenta que mis primeras lecturas ideológicas fueron anarquistas.  Siempre destaco que cuando se reglamentó demasiado al carnaval en Montevideo, allá por los años 40, se comenzaron a otorgar premios en dinero, por lo que muchas murgas fueron dejando de lado el compromiso para con el pueblo, y ofrecían un espectáculo de pan y circo, de divertimento, para asegurarse puestos que les adjudicaran los premios. Pero Araca nunca perdió su identidad, cantándole a las formas opresoras de la época. Posteriormente, en 1964 logramos alquilar el título, y junto con Oscar de Agustini, sacamos a  Araca la Cana, y le devolvimos el sitial de privilegio que había perdido en esos años en el Concurso Oficial de Agrupaciones, ubicándola en el quinto lugar. Fue un sueño cumplido para nosotros”. 

EL ARTE DE ESCRIBIR

“Aquel  que escribe en murga, toma las vivencias del pueblo, los aconteceres, los hechos notorios,  les da una forma estética,  adapta una música conocida que favorezca el entendimiento, y se los  devuelve al pueblo. A veces se te agradece por lo que das, pero no es más que la devolución de lo que el pueblo te prodiga. A la hora de escribir es importante saber de la retórica, gramática, simbolismos, juegos metafóricos, y todo lo que el mismo idioma te está ofreciendo. Cuanto más conocimientos se capitalicen, y más autores se lean, mejor calidad tendrá el producto final”.

EL AMOR DE SU VIDA

“La Soberana es una novia hermosa, debe ser la más hermosa de las “mujeres” que he tenido en mi vida. Para ella escribí, y desde mi rol de poeta, recibía críticas de mis compañeros ideológicos y militantes, que me decían que escribía de una manera  frente a la cual el pueblo no lo iba a entender, y yo les contestaba que estaban subestimando el entendimiento de nuestro pueblo. Tanto es así que en el año 1972, entre líneas, porque nos censuraban todo opté por escribir:
“Hay vientos de tragedia que nos llegan, huracanados, grises, tempestuosos. Ah, oráculo fatal! El hombre brega por elevar el mundo quejumbroso. Ni antígona tendría tal destino, ni Edipo soportara tal tormento. La humanidad deambula en los caminos bajo un bosque de ayes y lamentos. Encadenando al hombre ruge el viento, que de nefasta altura se descarga, no obstante, el hombre sigue en movimiento, buscando en las estrellas, la más clara”.
“Luego de esto el público se ponía de pie. Estaba entendiendo que le estábamos hablando de algo nefasto. Y cuando decíamos, “No obstante el hombre sigue en movimiento, buscando en las estrellas, la más clara”, asociaban de inmediato con el MLN (Tupamaros). Cuando mencionábamos la estrella, que era el logo del MLN, la gente se paraba, aplaudía, y gritaba consignas. Cada espectáculo de la murga se convertía en un fenómeno político, flameaban banderas del Frente (Amplio), y del Che. Claro, llegó un momento que lo hablé con mis hermanos, y entendíamos que los militares eran coherentes, tenían que prohibirnos, incluso en la soledad de mi celda llegué a pensar que sí, que eso tenía que acontecer. La Soberana se había transformado en un fenómeno social, estético, cantable, murguero, que nunca más se volvió a dar.  En aquella época los tablados comenzaban almediodía, y terminábamos la jornada a las 5 de la mañana, y a cada escenario nos seguía una extensa caravana de autos, camiones, y motos. Todo este público veía 15 o 18 veces a la murga en la misma noche, y nosotros lo  entendíamos como un reconocimiento, porque en alguna medida estos sectores del pueblo nos demostraban de que estábamos en un camino aceptado por la gente”. 

LA IMPORTANCIA DE LA MUJER EN EL GÉNERO  DE MURGA

“Hay gente que todavía sigue pensando que la murga debe ser integrada exclusivamente por hombres. Seguramente esa gente no sabe, puesto que no se ha informado, que en el año 1940, una piba de 14 años dirigió a “Don Bochinche y Compañía”. En la década del 60, Pochola Silva, saca “Rumbo al Infierno”, la primera murga femenina, solo la batería estaba conformada por hombres. En 1975, la Flaca, Mary Da Cunha salió en Diablos Verdes. Ese mismo año en La Soberana salían dos mujeres, que no pudieron hacerlo porque la murga fue prohibida. En ese entonces ensayábamos en el Club Arbolito, medio tiempo con La Soberana, y medio tiempo con Núcleo Murga Femenino, una murga totalmente femenina a la que le escribía, y el Peladito Díaz arreglaba las voces. Por el hecho de que yo le escribía, fue prohibida al igual que La Soberana, y la despojaron de la posibilidad de salir en Carnaval. En algún momento los historiadores de aquí a un siglo, van a decir: “Y hubo una época aquí en Uruguay en la que la murga era solamente integrada por hombres, y lo van a contar como una rareza”. 

LA MURGA COMO FENÓMENO CULTURAL

“Siempre está en el aire la frase que dice que “Todo tiempo pasado fue mejor”, y no creo que sea tan así. Si bien desde los inicios de la murga han existido grandes títulos, brindando espectáculos de corte tradicional, como La Gaditana que se va, pasando por Asaltantes (Con Patente), Curtidores (De Hongos), Los Diablos (Verdes), Patos Cabreros, etc; hoy por hoy hay tremendas murgas. La movida Joven ha enriquecido a nuestro carnaval. Existen murgas que tienen una magia muy especial como Agarrate Catalina, Queso Magro, La Mojigata, transgresoras, atrevidas, arriesgadas, que tocan a quien tienen que tocar sin tapujos ni prejuicios. En sí no hay una receta de que la murga sea de una determinada forma, y tenga que tener tal o cual cosa. Cada murga se va alimentando de las generaciones de murgas anteriores. Mucha gente teme que la murga pierda su esencia, y yo me pregunto, ¿Cuál es su esencia? Las circunstancias sociales han contribuido para que no haya una forma de hacer murga. A través de la vida uno se va dando cuenta de eso”.

EL LEGADO DEL CARNAVAL

“El Carnaval me dejó amigos, sueños, cárcel (ríe). Es parte de mi vida. Me dio muchos amores, noviazgos, eran hermosas las gurisas de los barrios que te veían pintado y querían abrazarte y tocarte. Me brindó enamoramientos múltiples, amistades. En cada murga, en cada tablado, en cada lugar, iba cosechando amistades que van a ser para toda mi vida. Carnaval es una escuela de amistades. A través de él vas granjeándote amistades que no se rompen nunca más. Pero lo mejor que me dejó fue la comunicación con tu pueblo, la respuesta que ese pueblo le fue dando a todo lo que vos pretendiste darle. Esa comunión con tu propia gente es de lo más hermoso que te puede prodigar carnaval. Estas entrevistas también son un legado del Carnaval para mí, porque fomentan la preservación de la memoria histórica de nuestra identidad, y eso es algo que el pueblo exige, y a lo que tiene derecho. Es muy bueno trasladar la verdad, historia y vida de un entrevistado, para luego continuar proyectándola a través de un afán periodístico”.




No hay comentarios:

Publicar un comentario